TÉCNICA TOMATIS: LA DEPRESIÓN Y LA ANSIEDAD
Luis tenía 48 años cuando llegó a nuestra consulta recomendado por uno de los pocos médicos que conocen nuestro trabajo. Su aspecto era triste, llevaba 20 años probando diferentes tratamientos de todo tipo, en ese mismo momento estaba tomando antidepresivos, se sentía torpe, tenía una postura encorvada, sus movimientos carecían de coordinación, tenía un sentido pobre del ritmo, la voz era monótona y sin timbre y era fácilmente distraído, en su opinión. Tenía un carácter reservado y tímido, le costaba mucho relacionarse con desconocidos, en cambio en los negocios era impetuoso. Le gustaba pasar muchas horas en el jardín, disfrutaba mucho de la lectura. La música le afectaba mucho, se protegía de ella porque una de sus crisis de ansiedad había llegado al escuchar una canción, actualmente no escuchaba música para protegerse de ella. Tenía mala memoria. Le faltaba interés por los demás. Las grandes recaídas le habían sobrevenido cuando sentía que era demasiado lo que tenía que hacer. Tiene cinco hijos uno de ellos padece una lesión cerebral, lo cual ha supuesto para él una gran responsabilidad. La primera depresión la tuvo con 25 años al terminar sus estudios. Suele ocurrir después de acontecimientos que le hacen sentir que es más de lo que puede hacer o que suponen mucha responsabilidad.
Primer test (antes de la terapia)
En este Test se aprecia el nivel de ansiedad en la inmadurez de la curva ósea, la roja, también observamos 4 bloqueos en el oído izquierdo a la altura de uno, dos, tres y cinco años aproximadamente coincidiendo con la zona de unión pélvico lumbar, unión dorso-lumbar y riñón, páncreas hígado y vesícula biliar, el oído izquierdo es nuestro oído emocional, representa a nuestro pasado. El derecho es nuestro oído racional, está representando a nuestro presente y curiosamente a pesar de los bloqueos tiene dominancia en este oído.
Test final (después de la terapia)
Como puede observarse el cambio ha sido rotundo. El sistema nervioso actualmente está en armonía, queda un solo bloqueo a la altura de los 3 años, en zona de hígado, lo que nos habla de una mayor necesidad de vínculo con la madre, pero todos los demás bloqueos han desaparecido, sigue teniendo dominancia del oído derecho, lo cual sin duda ha ayudado mucho en este proceso de transformación.
En total Luis realizó 150 sesiones de media hora, primera fase: 60 sesiones, después descansó un mes, 2ª Fase: 30 sesiones de media hora, luego descansó un mes, 3ª Fase 30 sesiones de media hora. Descanso de seis meses y 4ª fase de 30 sesiones de media hora.
Actualmente no toma ninguna medicación. Está disfrutando de la vida más que nunca, ha sido sometido a mucho stress, debido a una serie de circunstancias laborales y familiares, pero ha seguido con su progreso y con su bienestar, da charlas en su comunidad sobre la unidad familiar y su esposa y sus hijos encuentran en él más apoyo que habían sentido nunca. Toda su familia ha sido muy beneficiada con el cambio de Luis y así nos lo han manifestado.
La audición, como la vista, es un don fisiológico. Pero la calidad de la escucha, como la calidad de la mirada, se construye poco a poco y a la medida de nuestra historia personal; es el resultado de nuestra sensibilidad, nuestras experiencias sonoras y de la relación con los demás.
TRANSFORMAR NUESTRA FORMA DE ESCUCHAR, GRACIAS AL TRABAJO DEL ESTIMULADOR ELECTRÓNICO EN EL OÍDO, ES TRANSFORMAR LA RELACIÓN CON UNO MISMO Y CON LOS DEMÁS, ES CONTACTAR CON LOS COMPONENTES DEL DESARROLLO PERSONAL.
- El equilibrio interior, la confianza en uno mismo.
- El deseo y la capacidad de comunicar.
- La calidad de la expresión en la elocución.
- La motivación, el dinamismo, la creatividad.