TÉCNICA DEL DOCTOR TOMATIS
Tenemos tres cerebros:
1. Tronco cerebral se encarga de nuestra supervivencia. Ya lo tienen los reptiles. Son los cimientos de nuestra casa.
2. Cerebro emocional: el encargado de conectar con los demás, de empatizar, son las paredes que nos sostienen. Ya lo tienen los mamíferos.
3. Cerebro cortical: nos permite ponernos de pie, hablar, leer, escribir, comunicarnos, hablar en público y cantar.
La estimulación de los tres simultáneamente nos coloca en la salud, la armonía emocional y la comunicación eficaz. Es el cerebro que los humanos.
Cuando los tres están en armonía por haber hecho un buen trabajo simultáneo de estimulación ¡La vida es sencillamente preciosa!
El Dr. Tomatis era médico, se especializó en otorrinolaringología y se había interesado mucho en la física. Se consagró por completo a su profesión desarrollando la conocida Técnica Tomatis.
Su padre, Humbert Tomatis era cantante profesional en la ópera de París.
Tomatis conjugaba su pasión por la música y el canto heredados de su familia y su práctica clínica, estaba muy interesado en las relaciones entre el oído y la voz a nivel clínico. Atendió a muchos cantantes amigos de su padre que debido a la cantidad de horas por día que dedicaban a practicar su canto desde voces muy potentes, acababan perdiendo su propia voz debido a que acababan afectando su oído. Inventó un aparato denominado oído electrónico, que permitió a estos cantantes, sacar de si sus mejores posibilidades tanto a nivel de escucha como a nivel vocal.
Él consiguió que recuperasen las frecuencias perdidas de la escucha y curiosamente al lograrlo, recuperaron sus voces con todo el potencial que estas tenían. A partir de ahí afirmó rotundamente, porque lo demostraba con su trabajo cada día, que las personas cantamos más con el oído, que con la laringe.
Inventó una nueva disciplina: La Audio-Psico-Fonología y sintetizó sus descubrimientos en los tres principios que le reconocieron en la Academia de Medicina y de las Ciencias de París en 1957, con el nombre de Efecto Tomatis, y que se resumían en:
– La voz, no contiene lo que el oído no escucha.
– Si modificamos la audición, la voz es inmediatamente e inconscientemente modificada
– Es posible transformar duraderamente la fonación por una estimulación aplicada durante un cierto tiempo, Ley de remanencia.
De estas leyes se deduce que cuando uno modifica la escucha de la persona uno modifica su voz, su lenguaje – el efecto se sitúa tanto a nivel de ritmo y de timbre, como de fluidez verbal.
Alfred Tomatis ha escrito numerosos libros, artículos, entrevistas que dejan constancia de su trabajo y de los fundamentos en los que se apoya.
LAS TRES FUNCIONES PRINCIPALES DEL OÍDO
– FUNCIÓN DE ESCUCHA:
Esta función es la que hace recibir la información sonora. Si hay una imperfección en la función del oído o bien esta función está contaminada por el stress, no se puede tener una escucha correcta. Se produce entonces una dificultad en la comunicación y por tanto en el aprendizaje.
– FUNCIÓN DE EQUILIBRIO:
El oído actúa sobre el equilibrio. Si hay daño o está alterada esta función, se produce un desequilibrio entre el oído derecho e izquierdo, esto hace que a veces no se pueda mantener la imagen corporal correctamente, produciéndose en ocasiones mareos , acúfenos, sensación de torpeza, inseguridad…
– FUNCIÓN ENERGÉTICA:
Es la función de efecto dinamo o de recarga energética. Si la energía es baja, no se pueden enviar suficientes estímulos sonoros al cerebro. Se produce, entonces cansancio, falta de concentración y memoria. Apatía y pesimismo.
Podemos decir por tanto que no es lo mismo oír que escuchar, de la misma forma que no es lo mismo ver que mirar. Tanto en ver como en escuchar existe un deseo activo para la captación y su posterior proceso del estímulo recibido. Es el deseo de comunicación el que hace actuar al oído de forma activa.
TEST DE ESCUCHA
Es el Test que examina el nivel de la curva de escucha
En este Test vemos como está la persona a nivel físico, mental y emocional. Valoramos si tiene ansiedad, hiperactividad, como está a nivel espacial y su capacidad de recibir la información del exterior objetivamente.
– EXAMEN DE ESCUCHA AÉREA:
Mide la capacidad latente, la adaptación social, la capacidad de comunicación a través de la escucha aérea.
– EXAMEN DE ESCUCHA ÓSEA:
Mide el estado de stress tanto físico como psíquico, a través de la escucha ósea.
– EXAMEN DE SENTIDO DE LA ORIENTACIÓN:
Mide la forma de administrar la información de la voz y el sonido, la precisión de la escucha y el concepto espacio temporal.
– EXAMEN DE LA SELECCIÓN DEL SONIDO:
Mide el grado de fatiga, la huida de la realidad, la capacidad de escucha del tono y timbre sonoro.
EXAMEN DEL OÍDO DIRECTRIZ:
Mide la capacidad de tratar la información sonora, el control de emisión de la voz, la capacidad, la tendencia negativa o positiva.
Más parámetros a evaluar en el Test de Escucha:
- Equilibrio entre el oído izquierdo y el oído derecho
- Ritmo
- Afinación
- Captación de las consonantes
- Concentración
- Memoria
- Intuición
- Control audiovocal
- Oído dominante
- Edades aproximadas en las que se produjeron los bloqueos
- Órganos del cuerpo que pueden estar más alterados, dependiendo de las frecuencias que estén afectadas.